ZONA CRÍTICA
Ismael García M.
Oaxaca, Oax., a 17 de
febrero de 2025.- Una credencial de afiliado formal al Partido Morena terminó
por sellar la impunidad para Alejandro Murat Hinojosa, blindado antes con el
fuero de senador. Así, con un plástico
guinda y cobijado por el hijo de Andrés Manuel López Obrador —el poder tras el
trono— terminó por sepultarse las ansias de justicia hacia el ex gobernador
oaxaqueño, de origen mexiquense. “Política de alianzas”,
justificó la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuando la cuestionaron
acerca de los nuevos morenistas afilados formalmente, como el hijo de José
Murat Casab. ¿Cuáles obras
inconclusas en Oaxaca durante su sexenio como morenista disfrazado de priista?
¿Cuáles megadeudas que heredó a su sucesor Salomón Jara? ¿Cuál “cártel del
despojo” que se incrementó durante el mandato del mexiquense? ¿Exigirle cuentas
por lo 3,500 millones de pesos que de deuda que le autorizó el Congreso
morenista para supuestas obras públicas? ¿Cuál fraude al Infonavit? CREDENCIALIZADO El pasado miércoles,
Alejandro Murat mostró, con sonrisa plena, una fotografía con Andrés López
Beltrán, secretario de Organización de Morena, momentos después de su
afiliación. El impacto mediático y
político fue brutal para los propios morenistas, tanto a nivel nacional como
estatal, porque era prácticamente una burla para quienes sí han luchado desde
la izquierda y desde los inicios por el Movimiento de Regeneración Nacional. “¡Seguimos construyendo
el segundo piso de la #4T! Con mi amigo @amlopezbeltran y #MORENA, vamos
con todo en esta nueva etapa de afiliación #SeguimosAvanzando”, restregó Murat
en la cara de todos los morenistas. Pésima decisión del
hijo de Andrés Manuel López Obrador de iniciar con el senador Murat un
recorrido por todo el país para la credencialización de mandatarios de ese
partido político. Apenas el pasado
domingo llegó a Oaxaca para que Salomón Jara Cruz se reafiliara, pero el daño
político ya estaba hecho. El golpe para lograr más impunidad para el mexiquense
ya estaba dado. ALIANCISTA “Para ganar una
elección tú haces alianzas con personas, entonces yo recuerdo ahora en la
campaña cuando fui a Sinaloa y se incorporaron algunas personas que firmaron,
que no eran de Morena, yo les decía ‘nosotros necesitamos una alianza muy
grande para ganar la mayoría calificada’, para poder hacer la reforma al poder
judicial”, afirmó el jueves la Presidenta de México. Obvio, la defensa, o en
su caso la crítica sobre ese tipo de alianzas debiera venir de la presidenta
del partido, Luisa Alcalde, pero ahora tiene licencia por maternidad, lo que ha
aprovechado Andrés López para posicionarse y apoderarse totalmente del partido. “Morena tiene política
de alianzas como cualquier partido político, el asunto es si esto define tus
principios o tu política, hay alianzas”, remarcó Sheinbaum, en defensa también
de Pedro Haces, ex priista y recientemente exhibido por sus megapropiedades. Lo cierto que la hoy
Presidenta de México sólo sigue el guión que le impuso López Obrador. Y ese guión le dice que
debe cuidar las “alianzas” que hizo en el país —así sean con grupos fuera de la
ley— para seguir manteniendo la supremacía política y para poder seguir
operando las propuestas legislativas morenistas. Pero, estas “alianzas”
están llevando a una crisis interna en el morenismo, donde fundadores del
movimiento muestran inquietud e irritación por la protección que reciben
quienes habrían violado la ley, pero en lugar de aplicarles justicia, reciben
premios. PENDIENTITOS Así que, los oaxaqueños
tendrán que olvidarse de que haya verdadera justicia en contra de Alejandro
Murat Hinojosa y muchos de quienes formaron parte de su gobierno, originarios
del Estado de México o de la capital del país y señalados de corrupción y saqueo. Un amplio recuento de
la polémica trayectoria de Alejandro, siempre de la mano de su padre José
Murat, lo puede encontrar en “Etcétera” (https://etcetera.com.mx/nacional/murat-presume-amigo-andy-lopez-beltran/#google_vignette), donde entre otras cosas podrá recordar
frases hoy contradictorias, pronunciadas por el patriarca López Obrador: “Cuando Murat se
convirtió en Senador por Morena, AMLO no se quejó ni emitió una sola crítica,
como sí lo hizo cuando el oaxaqueño se perfilaba como aspirante al gobierno
estatal. De hecho, después de que Murat se convirtió en gobernador la cercanía
con la 4T fue evidente y los halagos mutuos, frecuentes. “Pero no ocurría así
cuando AMLO aún era oposición. El 27 de septiembre de 2015 el entonces líder de
Morena tuiteó que ‘sería ofensivo para los oaxaqueños, uno de los pueblos con
más cultura en el mundo, el regreso de la barbarie del PRI con Ulises o Murat’. “El 29 de enero de
2016, AMLO escribió en su cuenta de X: ‘Designar al hijo de Murat como
candidato del PRI en Oaxaca, demuestra que en vez de república existe una
monarquía hereditaria y corrupta´. “El 27 de mayo de ese
año, calificó a Murat como parte de la ‘mapachada inmunda’ que operaba dentro
del PRI. Un día antes acusó a Reforma de ‘cucharear’ la encuesta sobre la
gubernatura en Oaxaca para poner como ganador a Murat: ‘La encuesta de Reforma
sobre Oaxaca está cuchareada. Salomón Jara de Morena ya rebasó a Murat y el
candidato de Gabino y Diódoro se rezagó’”. BIENVENIDO Pero todo ha quedado en
el olvido: Murat Hinojosa ya es una buena persona, ya está santificado por la
4T y ahora luchará por el “segundo piso de la Cuarta Transformación”. Atrás quedaron los
señalamientos de que regaló fiats notariales y bases laborales al finalizar su
sexenio, pese a que se había comprometido a no hacerlo. Atrás quedaron los
probables fraudes con 3,500 millones de pesos que pidió prestado —y que le
autorizó el Congreso local morenista— y cuyo destino aún es incierto. Atrás quedaron las
propiedades de las que se habría adueñado (además de las que se hizo su padre,
claro) mediante el “cártel del despojo”. Atrás quedaron los
señalamientos de corrupción por obras inconclusas y de pésima calidad, como el
auditorio en Huatulco, el centro cultural en la capital, la pavimentación de
las vialidades adjuntas al río “Atoyac”. Atrás quedaron las
inconclusas obras de la avenida Símbolos Patrios y muchas más. Atrás quedó el
megafraude y meganegocio en el Infonavit. Claro, a los morenistas
oaxaqueños y al titular del Poder Ejecutivo, Salomón Jara, sólo le queda seguir
con las acusaciones mediáticas. Pero definitivamente la cárcel o alguna sanción
penal no alcanzará al neomorenista Murat Hinojosa.
